Las ciudades son ámbitos clave para la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible establecidos por Naciones Unidas en 2015. De hecho, el Objetivo 11 marca la necesidad de “lograr que las ciudades y los asentamientos humanos sean inclusivos, seguros, resilientes y sostenibles”, un planteamiento que UN-Habitat trasladó con amplio consenso en 2016 a la Nueva Agenda Urbana, y que en 2019 se concretó en la Agenda Urbana Española. Entre los numerosos retos que las ciudades tienen en este contexto, ocupa un lugar prioritario el de la sostenibilidad energética, con creciente protagonismo en el debate público.
La transición energética, entendida como la transformación del modelo energético hacia la neutralidad en carbono, es una estrategia indispensable en la lucha contra el Cambio Climático y, en general, como soporte de la sostenibilidad del medio urbano. Ello exige el compromiso de todos los agentes implicados en la planificación y en el gobierno de las ciudades.
En Castilla y León, estos objetivos deben adaptarse a las particularidades de su sistema urbano, compuesto por una serie de ciudades de tamaño medio o pequeño inmersas en un amplio medio rural que afronta graves desafíos pero que ofrece, también, muchas oportunidades.
En los últimos años, la Junta de Castilla y León ha aprobado documentos como la Estrategia de Eficiencia Energética o la Estrategia de Regeneración Urbana que han dispuesto un marco favorable para avanzar en la sostenibilidad energética del medio urbano regional, en sinergia con otros objetivos de índole económica o social.
Asimismo, se han desarrollado iniciativas que han incidido en el potencial de una planificación integrada que afronte coordinadamente factores energéticos, espaciales y socioeconómicos. Es el caso del proyecto INTENSSS-PA, desarrollado entre 2016 y 2018 dentro del programa H2020 financiado por la Unión Europea y que, en el caso de Castilla y León, se sustanció en unas “Directrices para el desarrollo sostenible y la gestión integrada de redes de calor”. Estas representan un claro ejemplo de cómo el aprovechamiento de recursos endógenos como la biomasa forestal puede impulsar la actividad económica en el medio rural y al mismo tiempo favorecer la sostenibilidad de las ciudades de la región. La Consejería de Fomento y Medio Ambiente continua en este tipo de iniciativas, participando en un nuevo proyecto europeo, 2ISECAP, recién concedido y relacionado con el impulso y mejora de los Planes de Acción para el Clima y la Energía Sostenible.
En continuidad con los resultados del proyecto INTENSSS-PA, este documento base de la “Estrategia para la Transición Energética en las ciudades de Castilla y León” aborda de una manera más amplia las relaciones entre energía y medio urbano. Su finalidad es dar una visión de conjunto y ofrecer caminos adicionales para la consecución de los objetivos de sostenibilidad energética, valorando tanto el actual panorama regional en la materia como diversos proyectos ya en marcha, y proponiendo de manera sintética unas guías que orienten e impulsen la acción local. Todo ello se plantea desde el convencimiento de la utilidad de promover enfoques integrados tanto en la planificación como en la gobernanza de las ciudades de nuestra Comunidad.
Juan Carlos Suárez-Quiñones Fernández
Consejero de Fomento y Medio Ambiente
Cities are key places for the achievement of the Sustainable Development Goals established by the United Nations in 2015. In fact, Goal 11 sets out the need to “make cities and human settlements inclusive, safe, resilient and sustainable”, an approach that UN-Habitat transferred with broad consensus to the New Urban Agenda in 2016 and took shape in the Spanish Urban Agenda in 2019. Among the numerous challenges that cities are facing in this context, energy sustainability stands out and has an increasing prominence in the public debate.
Energy transition, understood as the transformation of the energy model towards carbon neutrality, is an indispensable strategy in the fight against Climate Change and, in general, as a support for the sustainability of the urban environment. This requires the commitment of all the agents involved in the planning and governance of cities.
In Castile and Leon, these objectives must be adapted to the particularities of its urban system, composed of a series of small and medium-sized cities within a vast rural environment that faces serious challenges but also offers many opportunities.
In recent years, the Junta of Castile and Leon has approved documents such as the Energy Efficiency Strategy or the Urban Regeneration Strategy, which have provided a favourable framework for making progress in the energy sustainability of the regional urban environment, in synergy with other economic and social objectives.
Furthermore, initiatives have been developed that have highlighted the potential of an integrated planning that addresses energy, spatial and socio-economic factors in a coordinated manner. This is the case of the INTENSSS-PA Project, developed between 2016 and 2018 within the H2020 programme financed by the European Union and which, in the case of Castile and Leon, resulted in the “Guidelines for the Sustainable Development and Integrated Management of Urban District Heating Networks”. These represent a clear example of how the use of endogenous resources such as forest biomass can boost economic activity in rural areas and at the same time favour the sustainability of the cities in our region. The Regional Bureau for Development and the Environment continues in this type of initiatives, participating in a new European Project, 2ISECAP, recently awarded and related to the promotion and improvement of Sustainable Energy and Climate Action Plans.
In continuity with the results of the INTENSSS-PA Project, this base document of the “Strategy for Energy Transition in the Cities of Castile and Leon” addresses the relationship between energy and the urban environment in a broader way. Its purpose is to provide an overview and offer additional ways to achieve the objectives of energy sustainability, assessing both the current regional panorama in this area and various projects already underway, and synthetically proposing guidelines to orientate and promote local action. All of this is based on the conviction of the usefulness of promoting integrated approaches both in planning and in the governance of the cities of our Region.
Juan Carlos Suárez-Quiñones Fernández
Regional Minister for Development and the Environment