Este libro surge del trabajo de investigación que realicé para obtener el título de doctor y que fue presentado en la Universidad de Valladolid en 2015.
Mi interés por el tema surgió tanto por mi conexión biográfica con la región, como por mi participación en el proyecto “Políticas Urbanas Aplicadas a los Conjuntos Históricos” financiado por el Plan nacional I+D+i y dirigido por Alfonso Álvarez Mora.

El propio título del libro es en sí una declaración de intenciones en un doble sentido. En primer lugar, porque la pregunta ¿patrimonio o ciudad? tiene una respuesta clara: patrimonio y ciudad. El patrimonio urbano, como producto y herencia de una sociedad, ha de convivir con la ciudad y sus necesidades, definiendo sus valores, encontrando su función y la manera de compaginarlos. Esa es nuestra labor como investigadores y como técnicos.

La segunda parte del título no hacía sino constatar una evidencia. La resolución de muchos de los problemas que aquejan al patrimonio urbano no pueden confiarse exclusivamente en los planes urbanísticos, ni tan siquiera paliarse desde los planes de vivienda. Estos instrumentos pueden regular el proceso de transformación de la ciudad e incluso proponer soluciones más o menos creativas, pero han de ser acompañados y no perjudicados por otras líneas de actuación.

Al igual que los instrumentos tradicionales de intervención urbanística son limitados, la necesidad de análisis más amplios que den una visión general más realista de lo que la planificación puede conseguir está en la base de su correcta aplicación. Por ejemplo, diríamos más bien que estos instrumentos se han aplicado de manera insuficiente al no verse acompañados de otras medidas que atajen los problemas que aquejan a muchos de los Conjuntos Históricos rurales de Castilla y León: despoblación, desequilibrios demográficos, falta de empleo, etc. O que no han sido capaces de contrarrestar los efectos perversos de la especulación económica en aquellos otros conjuntos más dinámicos.

Trabajos recientes realizados por mis compañeros del Instituto Universitario de Urbanística han corroborado estas cuestiones, especialmente en el medio rural, como la inadecuación de la legislación urbanística a las peculiaridades de los municipios menores, la dependencia de la iniciativa incierta -cuando no ausente- de los propietarios, la dificultad de observar una objetividad en las resoluciones de las comisiones territoriales o la inadecuación morfológica de muchas operaciones que demandarían una mejor lectura de índole paisajística. En definitiva, carencias que no hacen sino reclamar la programación de estrategias integrales que acompañen la protección del patrimonio, en una visión holística, dinámica y adaptada a sus valores y necesidades. Es decir, no hay fórmulas únicas ya que todo esto debe adaptarse además a la diversidad de situaciones y contextos en qué se haya cada conjunto histórico.

Volviendo al libro, quisiera comentar brevemente la estructura del mismo. Los primeros tres capítulos son en cierto modo introductorios, para sentar las bases de los conceptos que se trabajaron en la investigación, así como una combinación de un estado de la cuestión y una visión panorámico-comparativa de los instrumentos de intervención aplicados en otros contextos. Sin embargo, parece interesante preservarlos en esta publicación por su valor didáctico y como germen de posibles nuevas investigaciones. La investigación es en sí un continuo estudiar y aprender para analizar mejor y extraer mejores conclusiones.
Los capítulos 4, 5 y 6 abordan la cuestión en Castilla y León, analizando su contexto territorial y normativo, así como ilustrando en profundidad seis casos de estudio en cierto modo representativos de diferentes casuísticas encontradas en los Conjuntos Históricos analizados. Para quien desee acceder a los análisis cartográficos y estadísticos de los 13 conjuntos analizados, se ha dejado un enlace en que podrán ser descargados.

Finalmente, quisiera expresar mi agradecimiento al Instituto Universitario de Urbanística por la publicación de este documento que ahora ve la luz.

Valladolid, septiembre de 2021