Se trata de desarrollar el planeamiento para un núcleo de 1.000 habitantes, entre Valladolid y Medina del Campo, situado en un paraje de páramos cultivados, con suaves desniveles de terreno. El núcleo de Serrada cuenta con cierto dinamismo económico -agricultura, bodegas, algunos talleres…- y en los últimos años ha experimentado desarrollos residenciales fuera de la ley, al margen de los límites definidos por la Delimitación de Suelo Urbano vigente. Este y otros fenómenos de crecimiento incontrolado han contribuido a descomponer los bordes del núcleo y a configurar un conjunto heterogéneo, con vacíos interiores -eras, majuelos, etc.- y con baja calidad en las construcciones o en los tejidos perimetrales. El planteamiento del trabajo arraiga en un conocimiento detallado del estado real del tejido construido. A partir de aquí se plantean las reglas de su progresiva compleción, con el objetivo de mejorar la calidad del espacio urbano y de asegurar una forma equilibrada para el futuro del núcleo. Este trabajo sirve como campo de pruebas de los criterios de planeamiento y de diseño urbano para pequeños núcleos desarrollados en el departamento.